Cada segundo domingo de mayo, millones de personas alrededor del mundo celebran el Día de las Madres. Entre flores, abrazos, llamadas y almuerzos familiares, este día se ha convertido en una de las fechas más entrañables del calendario. Pero pocos conocen que su origen tiene raíces tan profundas como diversas, que van desde rituales en la Antigua Grecia hasta una activista pacifista en los Estados Unidos.
Los primeros homenajes a la maternidad se remontan a las civilizaciones antiguas. En la Grecia clásica se rendía culto a Rea, madre de los dioses del Olimpo, en celebraciones que coincidían con la primavera, símbolo de fertilidad y renovación. Los romanos también rendían tributo a Cibeles, otra figura maternal divina, durante el festival llamado “Hilaria”.
Con la expansión del cristianismo en Europa, estas tradiciones paganas se transformaron. Durante el siglo XVII en Inglaterra, el llamado “Domingo de las Madres” se celebraba como una jornada en la que los fieles regresaban a su iglesia “madre” y aprovechaban para visitar a sus madres, llevándoles pequeños obsequios.
Anna Jarvis y el inicio moderno en Estados Unidos
El Día de las Madres como lo conocemos hoy tiene su punto de partida en Estados Unidos gracias a una mujer llamada Anna Jarvis. Su madre, Ann Reeves Jarvis, había sido una activista que organizaba grupos de mujeres para atender a soldados heridos y promover la salud pública durante la Guerra Civil estadounidense. Tras su muerte en 1905, Anna Jarvis quiso honrar su memoria con una ceremonia especial.
Fue en 1908 cuando Jarvis organizó el primer Día de las Madres oficial en una iglesia de Grafton, Virginia Occidental. La idea tuvo una rápida acogida, y para 1914, el presidente Woodrow Wilson proclamó el segundo domingo de mayo como día nacional para celebrar a las madres.
Sin embargo, Anna Jarvis terminaría oponiéndose al rumbo comercial que tomó la festividad. Denunció la banalización de su propósito original y llegó incluso a demandar a organizaciones que lucraban con su creación. Aun así, el Día de las Madres se consolidó como una tradición global.
La expansión internacional
Aunque en muchos países se adoptó la fecha estadounidense de mayo, otros tienen celebraciones en días distintos. En México, por ejemplo, el Día de las Madres se celebra cada 10 de mayo sin importar el día de la semana, una costumbre establecida desde 1922. En el mundo árabe, se conmemora el 21 de marzo, coincidiendo con el inicio de la primavera. En países como Tailandia, se celebra el cumpleaños de la reina madre.
Más allá de los regalos
El Día de las Madres es hoy una de las fechas comerciales más importantes del año, pero su esencia sigue siendo la misma: reconocer el amor, la entrega y el sacrificio de quienes nos dieron la vida. Es una jornada que, más allá de los obsequios, invita a reflexionar sobre el valor de las madres y su papel fundamental en la sociedad.
“El amor de una madre es el combustible que permite a un ser humano hacer lo imposible”, escribió Marion C. Garretty. Tal vez por eso, más de un siglo después del sueño de Anna Jarvis, el Día de las Madres continúa siendo un homenaje universal.