Se trata del comandante del Batallón de Ingenieros # 52, quien según las investigaciones habría cometido varios delitos
Según la Fiscalía Penal Militar, el uniformado identificado como Fredy Alberto Quesada, que ostenta el grado de Teniente Coronel, y actualmente se desempeña como comandante de una unidad castrense ubicada en Pasto, aprovechando su cargo, presuntamente alquiló una maquinaria amarilla perteneciente a la institución, para el beneficio de un particular.
Alrededor de 50 millones de pesos sería el monto pactado por el alquiler, lo que, de ser comprobado luego de las correspondientes investigaciones, se tipificaría como una extralimitación de funciones; en ese orden de ideas la Fiscalía Penal Militar, designó un equipo de expertos para recopilar las pruebas necesarias en el caso.
Hasta el momento de acuerdo a las indagaciones preliminares por parte del ente acusador, existe material probatorio de manejos administrativos irregulares, al permitir que con bienes del estado se beneficie un particular y no la comunidad de la jurisdicción.
Aunque el comandante del Batallón 52 se declaró inocente de los cargos que se le imputan, un juez penal militar, declaró legal su captura, la cual se hizo efectiva por personal policial en Pasto; dentro de operaciones similares el Ejército reportó la captura de otros seis integrantes activos de la institución, una persona en uso de retiro y un civil; que presuntamente estarían comercializando de manera ilegal armamento oficial, además de dedicarse al tráfico de estupefacientes.
Contrainteligencia Militar, sigue trabajando para detectar dentro de sus filas cualquier indicio de corrupción, narcotráfico y otros delitos que se pueden cometer manchando el honor y sacrificio de miles de hombres y mujeres que portando el camuflado, sirven con abnegación y heroísmo en todos los rincones del territorio.
El comunicado oficial destaca que estas acciones son necesarias para garantizar la transparencia y la legalidad de todas las operaciones; por cuanto no se escatiman esfuerzos por aclarar cualquier manto de duda que recaiga sobre una de las instituciones más reconocidas por los colombianos.