Mientras avanza el paro de maestros en todo el país, la Federación Colombiana de Educadores, insiste en que es necesario el hundimiento de la Ley Estatutaria de Educación
Los motivos expuestos por los docentes se refieren a que inicialmente se había llegado aun acuerdo con el gobierno nacional, pero el 5 de junio en su llegada al Senado de la República, el texto fue alterado radicalmente, lesionando los intereses de quienes defienden la educación publica.
Según manifiestan, “el proyecto conciliado con las bancadas de la Comisión Primera del Senado, no corresponde a los acuerdos suscritos entre el gobierno y Fecode, y tampoco fue consultado”. Así las cosas decidieron irse a paro hasta el 20 de este mes, celebrando continuamente asambleas informativas a nivel nacional, departamental y municipal, en las que también se tomarán desiciones sobre los pasos a seguir.
Dentro de esas determinaciones estan contempladas la opciónes de plantones, mitins y movilizaciones en las capitales de departamentos; pero quizá el hecho más importante de estas jornadas es la toma a Bogotá, programada para el lunes, donde el gremio de educadores le exigirá al gobierno Petro, el retiro del proyecto o el hundimiento del mismo.
Pero ¿Qué es lo que tiene inconformes a los profesores?:
De acuerdo al analisis que han realizado, en las actuales circunstancias esta sería una ley que perjudicaría enormemente el desarrollo y cobertura de la educación pública.
Las razones:
Consideran que hay un retroceso ante derechos adquiridos en luchas sociales durante los últimos 30 años, además, que, se desvirtua el espiritu de la educación como un derecho fundamental y bien común.
Afirman que se mercantiliza la educación y se vulneran los derechos laborales del cuerpo docente; con respecto al articulado la preocupación radica en lo que denominan “un ataque a la formación en los grados de preescolar en 3 niveles: transición, prejardín y Jardín”, incidiendo negativamente en la formación integral de los más pequeños.
No están de acuerdo con la implementación de la educación mixta e hibrida porque los pone en desventaja con respecto a nuevos modelos educativos como la virtualidad, donde la mayoría de instituciones públicas no tienen los recursos necesarios para hacer efectivo este modelo, lo cual según Fecode promueve la privatización, dejando a una buena parte de la comunidad estudiantil sin posibilidades de acceder a dichos procesos académicos.
La evaluación docente es otra piedra en el zapato, ya que la enmienda propone evaluar a los maestros del país basandose en resultado externos y estandares internacionales, que según los quejosos desconocen la realidad que afronta el país, en materia educativa, donde el estado es incapaz de garantizar el acceso a educación formal, especialmente en las zonas más apartadas.
La posibilidad de financiar a instituciones privadas con dineros públicos es otro de los puntos de desencuentro entre los pedagogos y el gobierno nacional, lo que eliminaría de tajo el carácter de bien común afectando a los más vulnerables.
Con respecto a las planteles educativos normalistas insisten en que perderían el regimen especial quedando en indefinición al aparecer un nuevo nivel educativo denominado “Educación Terciaria”.
El Sena, considerado por mucho tiempo la “Universida de los pobres”, gracias al modelo educativo, la investigación y el aporte a la productividad de Colombia, según el dcumento pasaría al Ministerio de Educación cambiando su esencia.
Lo cierto es que en muchos otros aspectos Fecode, respalda la gestión y los objetivos del actual gobierno, pero en el tema de la educación es cada vez más evidente la discordia al no respetarse los acuerdos previos, aunque vale aclarar que siguen dispuestos a aportar en la construcción de una nueva propuesta.