Como antesala a la conmemoración de un año más de nuestra independencia del yugo español, las fuerzas militares de Colombia, en ceremonia especial reconocieron a quienes vistiendo el camuflado, representaron a nuestro país en la confrontación armada entre Corea del Sur y Corea del Norte.
Este enfrentamiento tuvo lugar en la Península de Corea entre 1950 y 1954, allí 5062 soldados del Batallón Colombia, lucharon junto a otras fuerzas aliadas convocadas por las Naciones Unidas, para hacerle frente a Corea del Norte, que en ese entonces fue apoyada por la desaparecida Unión Soviética.
En este triste pasaje de la historia, perdieron la vida 145 combatientes colombianos, otros 69 desaparecieron, y 610 fueron heridos, según los registros de la Embajada Coreana en Colombia.
Para honrar la memoria de quienes ofrendaron su vida en la guerra, y de los que retornaron a su patria, unos para continuar en las filas del ejército, otros buscando integrarse a la sociedad civil en diversos trabajos; así como para los que aún sobreviven; en todas las unidades militares de Colombia, se les reconoce como héroes.
En Nariño, el pasado 19 de julio, se homenajeó a los valientes hijos de esta tierra que participaron del conflicto de los dos coreas; El Comando del Batallón de Ingenieros de Combate N° 23 – General Agustín Angarita Niño, en jornada especial entregó reconocimientos a los sobrevivientes y a sus familiares; destacando siempre el arrojo del soldado pastuso, por su mística y entrega.
En ese mismo sentido, encontramos en los relatos históricos de la mencionada guerra, la mítica frase pronunciada por un alto oficial de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, donde expresa su admiración por la capacidad y valentía de nuestros coterráneos
«He combatido en tres guerras. Pensé que nada me faltaba por ver en el campo del heroísmo y de la intrepidez humana. ¡Pero me faltaba ver combatir al Batallón Colombia!» – Blackshear M. Bryan, Teniente General del Ejército de Estados Unidos.
