El director departamental de Gestión de Riesgo de Desastres, Jader Gaviria, informó que el departamento de Nariño vive una compleja situación causada por el incremento de lluvias en esta región de Colombia; por tanto, y basados en la información del IDEAM, que pronostica fuertes precipitaciones pluviales, se debe extremar medidas de prevención entre quienes acuden a diferentes lugares de oración en temporada de Semana Santa.
En sitios como el corregimiento de El Pedregal, en la vía Ipiales y El Motilón, jurisdicción del municipio de El Tambo, se ubicarán los únicos puntos de atención de los organismos de socorro, pues según el plan de contingencia establecido para este año, no es conveniente realizar los recorridos a pie, por los peligros que ello implica; la recomendación de las autoridades es transitar en vehículos y estar atentos a posibles deslizamientos.
“Desde la Dirección de Gestión del Riesgo, estamos invitando a toda la comunidad de Nariño a que no realice las caminatas tradicionales, los peregrinajes a pie, de Pasto hacia las Lajas, El Tambo y otros templos religiosos, puesto que es muy riesgoso, el IDEAM nos ha informado que la Semana Santa estará pasada por lluvias y en la doble calzada hay mucha caída de piedra, por ello, no queremos situaciones que lamentar”, – insistió Gaviria.
Por los constantes aguaceros en lo corrido del mes de abril, ya se han presentado emergencias en localidades como El Peñol, donde colapsó el sistema de alcantarillado, Sotomayor y El Tambo, que registraron inundaciones, sumado a la vigilancia especial del complejo volcánico Chiles – Cerro Negro, que continúa activo y con incremento en la sismicidad.
Este tipo de circunstancias son las que han llevado a los organismos de atención a replantear los planes de contingencia, para poder responder de manera oportuna ante cualquier eventualidad.
Antes de un viaje es importante adoptar las medidas de seguridad personal y familiar, como la revisión exhaustiva del estado de vehículos, equipos de carretera, señalización y provisiones. así como también la documentación de los automotores y de los miembros del núcleo familiar que emprenden el desplazamiento.
Por Ultimo, se insiste en acatar las recomendaciones de los comités municipales de Gestión de Riesgo, y de conducir con prudencia, dada la alta afluencia de personas en lugares de oración o descanso.
